jueves, 5 de junio de 2014

Merecido homenaje a Roberto Alés

Tuvo la valentía de tomar las riendas de un Sevilla que se encontraba con un panorama desolador a todos los niveles. En el momento más turbulento de la entidad nervionense, Roberto Alés con su gran capacidad, elocuencia y credibilidad supo recomponer la situación y construir los cimientos sobre los que se basaron los momentos más gloriosos de la historia del Sevilla FC.
 
Por eso y por mucho más, la Entidad, comprometida fielmente su historia, ha rendido tributo al que fuera máximo mandatario entre los años 2000-2002 con un acto cargado de emociones y que estuvo encabezado por el presidente José Castro y el consejo de administración al completo.
 
La primera gran emoción llegó cuando Alés llegó a un antepalco abarrotado que se puso en pie y recibió con un dilatado aplauso al expresidente, que no pudo contener las lágrimas al ver a toda su familia, amigos, exjugadores como Pablo Alfaro, Antoñito, Castedo, Francisco Lama, Javi Navarro Gallardo o exentrenadores como Joaquín Caparrós, Manolo Jiménez o Antonio Álvarez . Esto tan sólo fue el principio de un amalgama de sentimientos que embargaron al homenajeado pero que no le impidieron tomar la palabra: “No tengo más remedio que agradecerle al presidente del Sevilla FC, José Castro, este homenaje al igual que la presencia al presidente de la RFAF, Eduardo Herrera, amigos y familiares, y de forma especial tengo que hacer una referencia a Joaquín Caparrós y a Monchi, porque ellos son los artífices reales del buen equipo que se construyó”.
 
Alés continuó con una curiosa anécdota: “Yo recuerdo perfectamente cuando vivimos el ascenso, todos se fueron a la Puerta Jerez a conmemorarlo, yo me quedé solo en el palco con gran ilusión y no quise ir porque Primera era el sitio que nos correspondía estar”.
 
Sus palabras llegaron al término de un acto en el que el Maestro Araújo ejerció de maestros de ceremonias y comenzó haciendo un símil entre Roberto Alés y Moisés en busca de la Tierra Prometida.
 
Seguidamente, un emotivo video de futbolistas que coincidieron con Alés –Antoñito, Casquero, Castedo, Moisés García y Francisco Lama- en los que resaltaron su “valentía para tirar del equipo y de la institución”. Y en representación de los más de 30 jugadores que defendieron el escudo del Sevilla FC con Alés como presidente, tomó la palabra el capitán de aquel entonces, Pablo Alfaro, asegurando que “cuando sea mayor, mi reto será parecerme a él”.
 
Entonces llegó el momento de escuchar la banda sonora de los momentos gloriosos cuyos cimientos construyó el homenajeado, el Himno del Centenario interpretado por su compositor, Javier LAbandón pero con una versión acústica muy especial, con su hijo a la guitarra, y una letra al final, dedicadas para él.
 
Roberto Alés de nuevo no pudo contener las lágrimas y visiblemente emocionado continuó intentando aguantar el tipo cuando en un video protagonizado por sus más allegados le dedicaban unas palabras, y finalizaban sus nietos pequeños diciéndole lo mucho que le quieren.
 
Tampoco Joaquín Caparrós pudo contener entonces las lágrimas, y era su turno para dirigirse al expresidente. Con un nudo en la garganta, el técnico de Utrera entonces su discurso mostrando su eterno agradecimiento al homenajeado. Seguidamente, otro de los artífices del momento, Monchi, fue quien tomó la palabra.
 
Luego fue el turno de Eduardo Herrera, presidente de la RFAF, quien le impuso la medalla de oro de la entidad, por ser “una persona de oro”.
 
El broche lo puso el presidente José Castro quien, emocionado, le entregó una escultura conmemorativa con los títulos conseguidos sobre un muro de ladrillo, como metáfora de los cimientos que construyó. Posteriormente, Castro descubrió el cuadro con el retrato de Alés apoyado sobre una mesa de despacho que es en realidad suquerido Puente de Triana- es trianero de nacimiento-.
 
Sesiones fotográficos para terminar un acto en el que se hizo justicia con el primer arquitecto del Sevilla actual, con aquel que construyó los cimientos de la gloria. (www.sevillafc.es)