El guardameta del Sevilla FC Antonio Alberto Bastos Pimparel, Beto, interveno en SFC Radio tras volver del Mundial de Brasil. Beto quiso hacer un hueco en sus vacaciones para atender a la radio sevillista donde hizo balance de la campaña: “Para mí ha sido la mejor temporada de mi carrera porque se han juntado muchos factores, lo conseguido con el Sevilla, la clasificación en una liga como la espoñala no es fácil, Copa de la UEFA y después, convocado con el mundial, dos partidos como titular, ha sido muy importante para mí y doy gracias a Dios por lo vivido”.
Ahora afronta el futuro inmediato muy ilusionado y siendo consciente de que es uno de los pesos pesados del vestuario del Sevilla FC: “Es importante saber que eres alguien respetado, al que los jugadores escuchan, soy uno de los más veteranos, con experiencia de grupo, de colectivo, que creo que puede ayudar al resto y espero hacerlo. Le deseo mucha suerte a Rakitic, le deseo lo mejor, el Sevilla va a salir adelante, los jugadores van a y vienen, y el Club se mantiene siempre, y el Sevilla va a luchar, como siempre lo hace, por algo bonito”.
En este sentido aseguró que “la temporada va a ser muy exigente, seguramente el sevillismo va a esperar mucho de nosotros , y nos toca ser competitivos y corresponderles”.
Asimismo, se refirió a la gran cita de Cardiff: “Lo más importante es llegar bien a la Supercopa, disfruar del partido, tuve la suerte de disputar una en Mónaco y sé lo bonito que es. Ya he hablado con mis compañeros de selección, Contrao y Ronaldo, el Madrid parte como favorito pero el Sevilla siempre tendrá una palabra que decir”.
Por otro lado, Beto habló de su experiencia en el Mundial: “Tengo la sensación de haber salido muy pronto, pero también es cierto que la temporada ha sido muy larga y es bueno descansar y aprovechar para estar con la familia. A pesar de la eliminación de Portugal, me siento orgulloso porque he luchado mucho por estar como titular en el Mundial y lo he conseguido, es un sueño cumplido”.
Sensación agridulce para el cancerbero sevillista que no pudo evitar las lágrimas al decir adiós a Brasil porque “fue un sentimiento de rabia, de coraje, porque necesitábamos tres goles para clasificarnos, tenía molestias, pero quería seguir jugando y ayudar. Sentía la impotencia de sentir que se estaba acercando el pitido final y que no se iba a conseguir”.
A pesar de ello, el portero portugués se queda con el apoyo recibido pues “he conseguido el cariño de todo mi país, incluso de muchos aficionados de otros países en Brasil. Cuando llegamos a Portugal recibimos el apoyo de los nuestros, escuchar palabras de ánimo de tu país signifca que valoran todo lo que hiciste y te hace sentir orgulloso”. (www.sevillafc.es)
