Echando la vista atrás, reconoce que su inicio en el equipo no ha podido ser mejor, aunque tanto en lo colectivo como en lo individual el inicio no fue el deseado: "El balance general de la primera temporada ha sido impresionante. Como colectivo nos costó en los primeros días encontrar el equipo. No hablo de individualidades sino del sistema y conocernos, porque habíamos venido muchos nuevos. Pero una vez engranamos y pusimos lo que nos pedía el míster, ha sido una temporada memorable y espectacular. A nivel colectivo hemos puesto el nivel muy alto, y en lo individual han sido seis primeros meses duros por las lesiones y la falta de continuidad, pero en el último semestre cambió todo. Uno cuando llega a un club grande como el Sevilla, lo hace con ganas de hacer cosas importantes. A base de trabajo, sacrificio y estar centrado en lo que quería, lo pude sacar adelante y acabar una temporada de ensueño. Llegar el primer año a un club importante, ser campeón de la Europa League y quedar quintos, es una temporada para enmcarcar".
Además, afirma que su adaptación a la ciudad también ha jugado muy a favor de su rendimiento nada más llegar a Nervión: "Soy muy feliz en Sevilla, lo he dicho siempre. Tenemos un grupo impresionante con el que hay que sacarse el sombrero, porque más allá de los resultados se unió día a día para sacar las cosas adelante y esa fue nuestra fortaleza. Entre la ciudad, la afición y el grupo humano de técnicos y jugadores, hepasado un año de diferentes sensaciones. Hubo momentos felices y otros no tanto, pero el apoyo que siempre he tenido marca que ha venir haya sido una decisión acertada".
Aunque la exigencia es máxima, el argentino ya sabe que la aprieta al máximo, pero que también ayuda a cumplir los objetivos: "Aprendí que en Sevilla las cosas se manejan de esa manera. Tuvimos 13 jugadores nuevos y se nos exigía mucho, que es lo que lleva formar parte de un club grande como este. Es normal que se exija mantener el nivel. No va a ser fácil pero vamos a trabajar y a dejar todo para que así sea". Incluso, no descartó ir a por cotas superiores a las conseguidas recientemente, pero con cautela: "La Champions puede ser un objetivo, pero hay que ir paso a paso. Lo tuvimos cerca el año pasado y este equipo es capaz de todo, pero no me gusta meter demasiada presión ni hablar de cosas a largo plazo. Enfocaremos una buena pretemporada sin pasarnos ni descentrarnos de lo que hay que hacer. La ambición extrema puede ser contraproducente y el Sevilla puede tener ese objetivo, pero con cautela". (www.sevillafc.es)
